Leyendo a Rafael Muñoz Saldaña
Las versiones oficiales de los aliados, los reportes de testigos y los ensayos más respetados aseguran que el 30 de abril de 1945 Hitler se suicidó en su bunker bajo la cancillería de Berlín, ciudad ocupada por las tropas soviéticas.
Dio estrictas órdenes de que su cuerpo y el de Eva Braun fueran cremados para evitar los ultrajes que había sufrido el cadáver de Mussolini.
La cremación se llevó a cabo en los jardines de la Cancillería y los restos fueron sepultados allí mismo.
Cuando los soldados rusos penetraron en las instalaciones se apoderaron de los cuerpos y, aunque el gobierno ruso avaló la versión del suicidio, nunca se presentó al público la evidencia material para sustentar tal versión.
A partir de esa época surgieron diversas teorías que aseguraban que el cadáver pertenecía a un doble del dictador y que éste había logrado huir.
En 2010, el periodista Abel Basti publicó una investigación donde aseguró que el 22 de abril de 1945 Hitler voló al aeropuerto austriaco de Linz acompañado por ocho personas (incluyendo a Eva Braun). Supuestamente, permaneció allí cuatro días antes de volar a Barcelona.
Con la anuencia de los estadounidenses, a quienes según Basti les interesaba que Hitler viviera para contener el avance del comunismo, un convoy de submarinos partió de España, realizó una escala técnica en las Islas Canarias y desembarcó en la Patagonia entre julio y agosto de 1945, con la complicidad del presidente Edelmiro Farell y el ministro de Guerra Perón.
Según Basti: En los primeros años vivió en una estancia cercana a Bariloche, luego en otras partes del país, ya que cambió de residencia en más de una oportunidad. Siempre lo acompañaron dos guardaespaldas, a veces tres. Su actividad política se limitó a reuniones con viejos camaradas y algunos militares argentinos. Murió en Argentina en los años 60. Eva Braun, más joven, le sobrevivió”.
La Red Echelon (cuyo nombre también está en duda) es un supuesto sistema secreto de espionaje y análisis de datos desarrollado por la comunidad UKUSA, una alianza de naciones de habla inglesa (Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Canadá y Nueva Zelanda) para interceptar y analizar toda la información que circula vía satélite, como llamadas telefónicas, correo electrónico, etc.
Su propósito inicial fue investigar las comunicaciones militares de la Unión Soviética durante la Guerra Fría.
Su existencia y capacidad (se dice que puede revisar tres mil millones de comunicaciones al día) se han sabido a través de diversas fuentes públicas que, sin embargo, desconocen en detalle sus actividades posteriores a la Guerra Fría.
Esta falta de información ha sido la base sobre la cual se han tejido teorías de conspiración según las cuales el sistema se emplea para fines de seguridad, como la investigación de complots terroristas, los movimientos del crimen organizado y las actividades políticas de naciones que no pertenecen al grupo.
Sin embargo, en la década del 90, los periodistas Duncan Campbell y Nick Hager publicaron investigaciones donde indicaban que el gobierno norteamericano emplea el sistema Echelon para actividades ilegales, como el robo de propiedad intelectual, espionaje económico e intromisión en las actividades privadas de ciertas personas.
Estas sospechas han crecido después de los ataques del 11 de septiembre en Nueva York.
Las siglas HAARP son las iniciales del llamado PROGRAMA DE INVESTIGACIÓN DE AURORA ACTIVA DE ALTA FRECUENCIA, un proyecto desarrollado y financiado por la Fuerza Aérea y la Marina de Estados Unidos, la Universidad de Alaska y la Agencia de Proyectos Avanzados de Investigación para la Defensa (DARPA).
En funcionamiento desde 1993, su objetivo inicial fue el estudio del agujero de ozono y después derivó en la búsqueda de avances tecnológicos para fomentar los sistemas de vigilancia y las radiocomunicaciones. Hoy, su objetivo es el estudio de la ionosfera, la sección de la atmósfera cargada de iones a consecuencia de la radiación solar.
Su principal estación de trabajo se encuentra en Garona, Alaska.
La mayor parte de sus actividades son secretas.
Desde los primeros pasos de su desarrollo surgieron teorías indicando que HAARP encubre sus verdaderos propósitos.
A inicios de los 90, el Parlamento ruso consideró que sus antenas podían usarse como armamento para influir en la troposfera con ondas de baja frecuencia.
Las teorías más aventuradas sostienen que su propósito es provocar desastre naturales mediante la emisión de energía, es decir, que se trata de un arma geológica capaz de originar cambios climáticos e incluso terremotos.
Las versiones más extremas aseguran que el sismo de Haití a inicios de 2010 fue resultado de una prueba de HAARP.
Otra teoría asegura que Estados Unidos usa HAARP para recrear en Haití las “Diez plagas de Egipto”.
Creado en 2004, en tan sólo seis años Facebook se ha convertido en el sistema de redes sociales más importante del mundo.
A mediados del 2010 contaba con más de 500 millones de miembros que ingresan a esta página para intercambiar informaciones, datos personales y privados.
La historia formal sostiene que el sistema fue creado por Mark Zuckerberg y sus compañeros de la Universidad de Harvard para facilitar la comunicación entre los alumnos.
La red se extendió a otras universidades y pronto salió del ámbito académico.
A la fecha, sus ingresos anuales rondan los mil millones de dólares.
Sin embargo, al mismo tiempo que Facebook ampliaba su configuración, surgieron diversas teorías conspiraciones que ponen en duda su origen y su finalidad.
Según estas versiones, el plan de la red no es facilitar la interacción social: se trata de una sofisticada herramienta financiada por la CIA para el reclutamiento de agentes y la recopilación de información, también sirve para montar operaciones de inteligencia encubiertas.
Esta versión sostiene que los datos de todos los miembros van directamente a los archivos de la CIA, y que en el esfuerzo participan más de 16 servicios de inteligencia estadounidense, incluyendo el Pentágono y el Departamento de Defensa.
La información se almacena y se utiliza para crear perfiles sociopolíticos y cuadros de contacto de cada usuario.
En cuanto al origen del sistema, se dice que no fue obra de Zuckerberg sino del inversionista Peter Thiel, creador del sistema de pagos PayPal.
El 26 de agosto de 1978 el italiano Albino Luciani asumió el trono pontificio y tomó el nombre de Juan Pablo I.
Al ser electo, asumió como lema la humildad y en su ceremonia rechazó algunos de los honores reales conferidos a los papas.
El público quedó cautivado con la sonrisa del pontífice, sus discursos optimistas y algunos proyectos de reformas para acercar la Iglesia a los fieles.
El 28 de septiembre de 1978, poco más de un mes después de su elección, falleció en sus aposentos del Vaticano a causa de un infarto de miocardio.
Se dijo que, a petición de su familia, se realizó una autopsia.
Una serie de contradicciones con respecto a este asunto y a los detalles sobre la forma en que su cuerpo fue hallado suscitaron una serie de polémicas.
Las teorías indican que fue asesinado mediante envenenamiento.
Las hipótesis sobre el móvil del crimen han sido diversas. Una de las principales es que Juan Pablo I se propuso hacer una revisión de los manejos del Banco Ambrosiano, acusado de evasión de impuestos, movimientos ilegales de acciones y lucro mediante tratos injustos con los más necesitados.
Otra hipótesis relaciona su muerte con el homicidio del primer ministro italiano Aldo Moro, jefe del Partido Demócrata Cristiano, ocurrido ese mismo año, como culminación de su secuestro por las Brigadas Rojas.
Una teoría más menciona como probables autores del asesinato a las logias masónicas italianas.
David Yallop apoya la teoría de confabulación del Banco Ambrosiano con los masones y la mafia. Entre los principales sospechosos menciona a Paul Marcinkus, director del Banco del Vaticano, y a Roberto Calvi, director del Banco Ambrosiano.
Una versión alternativa es que los culpables fueron grupos neoliberales interesados en elevar a Juan Pablo II y promover la caída del comunismo.
A lo largo de los siglos ha sido común acusar a diversas minorías religiosas, en especial a los judíos, de asesinar a menores de edad para emplear su sangre en rituales satánicos.
El propósito de esa desacreditación es construir una teoría del complot de acuerdo con la cual los judíos pretenden eliminar la religión católica.
Esta no es sino una de las docenas de teorías conspirativas que se les atribuyen, como el envenenamiento de pozos comunes, la profanación de hostias y un supuesto proyecto para adueñarse del mundo.
La idea del libelo de sangre se remonta al Siglo XII. Las descripciones varían, pero en general se trata del secuestro de un menor cristiano que es conducido a la casa de un dignatario judío, donde se le juzga, se le tortura, se le sacrifica y cuya sangre se recoleta en un recipiente para beberla o mezclarla con alimentos.
Esta teoría ha atravesado los siglos, desde la Antigüedad a la Modernidad.
Entre los ejemplos más recientes de la teoría se encuentra la serie televisiva Ash-Shatat (La diáspora) producida en Siria en 2003. En ella se reitera la supuesta amenaza que representan los judíos y se muestran escenas en que emplean sangre infantil para amasar el pan ácimo que ellos denominan matza.
En la página HYPERLINK www.clonaid.com se encuentra el tagline: “Pioneros en clonación humana”.
En el apartado Historia, se asegura que se trata de “la primera compañía de clonación humana, fundada por Rael y un grupo de inversionistas”.
Rael (seudónimo del periodista francés Claude Vorlihon) es un falso mesías, fundador de la secta raeliana, basada en las supuestas revelaciones que los extraterrestres le hicieron a este personaje.
La responsable científica del proyecto es la doctora Brigitte Boisellier, obispa de la iglesia raeliana con antecedentes académicos más o menos aceptables.
En diciembre de 2002, Clonaid anunció la clonación del primer ser humano con la misma tecnología empleada para clonar a la famosa oveja Dolly.
El supuesto resultado fue una chica llamada Eve, que actualmente vive en Israel.
Las noticias continuaron: en 2003, una chica lesbiana dio a luz a un pequeño creado por los mismos medios. Luego, una pareja japonesa cuyo hijo había fallecido realizaron un clon del niño, etc.
Las teorías sobre una conspiración orquestada por Clonaid tomaron forma cuando la compañía no cumplió su promesa de facilitar la realización de exámenes por parte de especialistas.
El pretexto de la compañía fue su resistencia entregar a los pequeños a las autoridades para que se llevaran a cabo esas pruebas.
El motivo de la conspiración fue acrecentar el prestigio de Rael, pero sobre todo engañar a decenas de parejas para ofrecerles este servicio y despojarlos de su dinero, puesto que el proceso tiene un costo de 200 mil dólares.
Sin embargo, la forma en que Clonaid manejó la información, ocasionó que algunos especialistas en genética y reproducción dieran su punta de vista. Robert Winston, líder del proyecto sobre fertilización, aseguró que “la implantación de embriones es problemática y los fetos clonados sufren malformaciones tales que ocasionan su muerte”.
No hay nada más de sustancia en relación con este tema.
La credibilidad y el trabajo de Clonaid despiertan suspicacias, sin embargo se dice que actualmente el número de raelianos oscila entre 5 mil y 60 mil personas.
En la mañana del 11 de septiembre de 2001, una serie de atentados en Estados Unidos perpetrados por la organización terrorista Al-Qaeda marcaron un punto de inflexión en la historia y motivaron el inicio de largas guerras e intervenciones militares.
La parte más impactante de estos hechos fue el choque dirigido de dos aviones contra los Torres Gemelas de Nueva York. Lo que no se conoce tanto son las circunstancias en que terminó reducida a escombros la tercera torre (Torre Seven), de menor altitud, la cual resultó destruida siete horas después de las torres principales.
El dictamen oficial sostiene que el proceso de su incendio fue más prolongado pero, de una manera u otra, el fuego que se propagó desde la zona contigua al desastre fue el causante del colapsó, pues este edificio no fue colapsado por ningún avión.
Esas circunstancias fueron el motor de distintas teorías que afirman que su destrucción fue resultado de una demolición controlado con explosivos.
Un grupo de arquitectos, ingenieros y científicos asegura que la explicación oficial es insostenible.
Richard Gage afirma que se trata de un ejemplo obvio de demolición controlada: “Los edificios que caen en un proceso natural se colapsan por el lado en el que tienen menor resistencia. No caen en forma recta sobre sí misma”.
Los teóricos de la conspiración retoman varios hechos para apoyar su versión: los vestigios fueron removidos para evitar su análisis.
La tercera torres estaba ocupada por el servicio secreto, la CIA, el Departamento de Defensa y la Oficina para el Manejo de Emergencias, que podrían haber coordinado una respuesta al ataque terrorista.
La destrucción de la tercera torre nunca fue mencionada en el reporte de la Comisión Especial 9/11.
Otro argumento es que el edificio se hallaba a una distancia razonable de las otras dos torres (417 y 106 metros) y que las fotografías tomadas en el transcurso de ese día no revelan daños ostensibles.
En 2008, el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología presentó el resultado de siete años de investigaciones y recalcó la hipótesis del fuego, descartando el tema de los explosivos.
CALENTAMIENTO GLOBAL
En los medios masivos de comunicación hemos recibido grandes cantidades de información sobre el calentamiento global (el aumento de temperatura promedio en el mundo) y el cambio climático que éste ha provocado.
Para explicarlo, algunas teorías sostienen que no es más que un fenómeno natural que se ha observado en otras épocas.
Otras, más aceptadas, apuestan a una explicación antropogénica: es el resultado de la acción humana a causa del efecto invernadero artificial.
La acumulación del contaminante dióxido de carbono dispersado por as actividades industriales en la atmósfera provoca que el calor de las radiaciones solares permanezca encerrado y eleve la temperatura.
Estas explicaciones han sido desafiadas por una teoría conspirativa que afirma que el calentamiento global es un fraude motivado por razones financieras o ideológicas, en el que están involucrados el movimiento ambientalista, la ONU, el Club de Roma y personajes como Al Dore y Mijail Gorbachov.
Las motivaciones que se enuncian son variadas: un esfuerzo de los climatólogos para incrementar los fondos destinados a su actividad, un plan de los gobiernos para elevar los impuestos a las industrias, y hasta favorecer los programas políticos de los exitosos partidos verdes para llegar al poder.
El climatólogo Patrick Michael asegura: “si bien no podía hablarse de una conspiración, ciertamente una coalición de intereses ha promovido la teoría del invernadero. Los científicos necesitan fondos, los medios de comunicación necesitan una historia y los gobiernos necesitan una causa que valga la pena”.
El cúmulo de evidencias procedentes de fuentes muy diversas, incluyendo a las personas comunes que han visto alterado el ciclo de las estaciones, hace difícil pensar en una conspiración que es obra de un pequeño grupo.
Lo que sin duda puede ocurrir es que determinados actores sociales se valgan del fenómeno del cambio climático para sus fines.
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