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Desde hace 25 años, el cerro Uritorco es uno de los enclaves místicos más importantes de América latina. Y, como no podía ser de otra manera, fue uno de los lugares más concurrido por los amantes de la meditación y la espiritualidad durante la llamada "apertura del portal 11:11".
El Uritorco está ubicado en Capilla del Monte, en el Valle de Punilla, Córdoba.
La ciudad encarnó como meca esotérica en 1986, tras la difusión que alcanzó el supuesto descenso de un ovni en el cerro El Pajarillo. Pero este fabuloso escenario tiene muchas más historias para contar: allí se han cruzado indios comechingones, nazis esotéricos, gurúes místicos y buscadores de extraterrestres.
¿Cómo se activó este "vórtice" donde confluyen ovnis, mitología y ficción? Once preguntas, con sus respuestas, ayudarán a entender la popularidad del "santuario extraterrestre" argentino.
1. ¿Qué sucedió el pasado 11-11-11 en Capilla del Monte?
El inspirador del acto en Pueblo Encanto, un parque temático esotérico ubicado en Capilla del Monte, fue un joven de 24 años, Matías De Stefano, conocido hace diez años como "ñiño índigo", quien aseguró haber reunido 2.000 personas el pasado viernes 11.
La "recarga energética" no fue gratuita sino un tarifario escalonado: 380 pesos por los tres días, 300 por dos jornadas y 50 pesos si sólo se asistía el tercero.
De Stefano lanzó la convocatoria desde el sitio Encuentro 11, con amplia difusión en redes sociales, radio y televisión. "Centrándonos desde el corazón recibiremos e irradiaremos las energías que emite la ciudad intraterrena de ERKS y toda la Galaxia desde y hacia la Tierra", afirmaba.
2. ¿Qué es ERKS?
Es la sigla de Encuentro de Remanentes Kósmicos Siderales acuñada por Angel Cristo Acoglanis, un carismático osteópata griego asesinado en 1989.
A mediados de los 70 Acoglanis comenzó a llevar a pacientes, amigos e interesados en platos voladores a "visualizar" las misteriosas luces que se podían ver desde Los Terrones, una formación geológica situada a 14 km de Capilla del Monte.
Acoglanis invocaba "fuerzas espirituales" mientras cantaba mantras en un raro idioma al que llamaba Irdin.
ERKS, según Acoglanis, es una ciudad metafísica habitada por extra e intraterrestres. "El Griego" también anunciaba un inminente Plan de Evacuación y la Segunda Venida de un Cristo cósmico.
ERKS se volvía visible cuando Sarumah (entidad que "incorporaba" Acoglanis) recitaba un "abracadabra" específico en el idioma alienígena.
3. ¿Qué relación tiene ERKS con el Santo Grial y los nazis?
Acoglanis difundía su doctrina persona por persona. Si bien el discípulo más popular fue el brasileño José Trigueirinho, autor de "ERKS, mundo interno" (Kier, 1989) y "Señales de contacto" (Kier, 1989), el primero fue el antropólogo filonazi Guillermo Alfredo Terrera, quien dio forma al mito través de libros como "Antropología metafísica" (Kier, 1987) o "El Valle de los espíritus" (1989).
Para Terrera, el centro sagrado estaba bajo el Uritorco, donde yacía el Santo Grial y otras piezas templarias.
El escritor se presentaba como "custodio del Bastón de Mando", una barra de basalto que dijo haber recibido de manos de un ignoto Orfelio Ulises Herrera, quien lo habría hallado cerca del Uritorco en 1934.
Tras su muerte en 2000, el heredero del bastón fue el ingeniero Fernando Fluguerto Martí, líder de la Fundación Delphos, a quien Terrera dio pistas para buscar el caliz sagrado en el Uritorco y Patagonia.
Según Terrera, aquel bastón fue construido por "el cacique comechingón Voltán" (casi como el dios germánico Wotan). Estas ideas neotemplarias, y el presunto "origen ario" de esta etnia ("vikinga" porque los indígenas eran "altos y barbados"), llegaron con Jacques de Mahieu, un antropólogo nazi refugiado en la Argentina tras la Segunda Guerra Mundial.
Dos libros recientes, "Los buscadores del Santo Grial en la Argentina", de Hernán Brienza, y "José de Zer y los guaridanas de Varava", de Camila Torres, profundizan el tema, ambos en forma novelada.
4. ¿Qué tiene de sagrado el Uritorco, según las antiguas tradiciones?
Monir Addur, en 1986 secretario de cultura de la Municipalidad de Capilla del Monte, consideraba que el Uritorco (1950 metros de altura), no era un cerro común.
"Hay algo sagrado en él. En lengua aborigen significa 'cerro macho' o 'cerro de los loros'", explicaba Monir.
Comechingones y sanavirones, primeros pobladores del Valle de Punilla, habrían llegado a la región desde el 500 A. de C. En efecto, los hombres eran barbados, bastante altos (1,71 cm en los varones), y muchos, quizá el 10%, tenía ojos verdosos. Se presume que fueron un mestizaje amazónico-andino y se sabe con certeza que fueron exterminados por los españoles, asesinados o víctimas de epidemias.
Pero no desaparecieron por completo. De hecho, hacia 1900, la cima del cerro Uritorco siguió siendo escenario de ritos calendáricos, donde se hallaron morteros para ceremonias chamánicas con cebil (una sustancia alucinógena).
Desde entonces, según Addur, distintas tribus americanas habían elegido La Toma, el pie del cerro, como punto de encuentro para discutir la unidad de las naciones indígenas. Dicho sea de paso, Monir (ilustre conocedor del lugar) fue víctima de un crimen que nadie quiso resolver. Hoy es uno de los secretos vergonzantes del pueblo de Capilla del Monte.
5. ¿Qué otras leyendas se "cocinaron" en el Uritorco?
El primer rumor mágico data de comienzos del siglo XX. Se decía que en el cerro existía una "chimenea térmica" de dónde emergerían gnomos, elfos y duendes. Más tarde, este folklore fue asociado con la entrada a la ciudad de ERKS. Otros seres sobrenaturales fueron el ahijado del diablo, el ermitaño de Huertas Malas y el bombero fantasma, un espíritu veloz que corría entre yuyales encendidos.
En 1950, grupos hinduístas difundieron el concepto de que el Uritorco es un cerro con "prana" (energía). También se dijo que "el cerro crujía". Del quejido del espíritu de los nativos se pasó al ruido de las fábricas de ERKS, o a creer que el cerro es hueco. Los geólogos atribuyen el sonido a microsismos. De hecho, en la zona suelen registrarse temblores de grado 1 ó 2 en la escala Ritcher.
6. ¿Qué fue la "Operación Erks"?
Fue una actividad realizada el 8 de diciembre de 1985 por un grupo liderado por el contactado argentino Dante Franch.
Bajo ese nombre, el Instituto Planificador de Encuentros Cercanos (IPEC) anunció ante diversos medios que iniciaba una expedición para encontrar "a pico y pala" evidencias de la ciudad intraterrena.
Franch luego dijo haber ingresado a Erks en un "viaje astral".
Aquel "operativo" fue significativo por algo que sucedió un mes más tarde.
7. ¿Es cierto que aterrizó un plato volador en el cerro El Pajarillo?
En enero de 1986 apareció una gran mancha de espartillo calcinado, como causada por el descenso de un plato volador, en la ladera sur del cerro El Pajarillo.
El 16 de enero, una vecina octogenaria, doña Esperanza Pelliza de Gómez, acompañada por su nieto Gabriel, de once años, recibió una delegación oficial encabezada por Diego Sez, entonces intendente de Capilla del Monte. Dijeron que a las 22.00 horas del 9 de enero vieron desde su vivienda en Quebrada de Luna, un intenso resplandor rojizo, "grande como la Luna", sobre el cerro Aspero.
Manuel Gómez, dueño de la hacienda, no estuvo en casa la noche en que su familia vio el resplandor. Pero al otro día descubrió la imponente mancha. No existió ninguna relación visual entre ésta y las luces. Sin embargo, por la forma de la "huella", se asoció a una cosa con la otra.
8. ¿Nadie investigó el "aterrizaje" del cerro El Pajarillo?
Sí, pero en forma extraoficial. El intendente radical Sez y Jorge Suárez, por entonces secretario de gobierno y a cargo del área Turismo, firmaron y difundieron un documento: "Ya que no encontramos explicación válida para esta quemazón tan atípica, nos confirmaría que se podría haber producido el descenso de una nave Ovni (sic)".
Según Suárez, hoy ufólogo, no quisieron "desalentar la fantasía popular". Y agregaron que la fuente de calor quemó los pastizales "desde arriba". Nuestra visita al lugar un mes después determinó lo contrario, el espartillo y las piedras parecían haber estado expuestas al calor como si las llamas hubiesen trepado desde la base del cerro. Cuando tomamos las medidas de la supuesta huella (115 m. x 57 m.), nos sorprendió que nadie más lo hiciera.
En 1996, Luis Bartolli, jefe de Bomberos en la época, reveló que la Municipalidad no pidió establecer las causas del incendio.
Roberto Basso, quien presidió el Partido Justicialista de Capilla del Monte, reivindicó la creación de la "mancha", para la que contó con ayuda de comerciantes locales y obreros que usaron sopletes de acetileno. Para él, el éxito del falso aterrizaje de El Pajarillo se debió a la credulidad de los funcionarios, la "Operación ERKS" y la cobertura de "Nuevediario".
En 1996, ante la revista "Descubrir", Basso (fallecido en 2009) se atribuyó el montaje, aunque lo hizo en forma anónima y sin presentar pruebas, como Suárez y Sez cuando dijeron: "aterrizó una nave".
9. ¿Qué papel cumplió el periodismo en los orígenes del mito?
Entre algunos periodistas existe un lugar común según el cual las "noticias de color son mero entretenimiento" y "no merecen ser investigadas".
El legendario cronista de "Nuevediario", José de Zer, borró esos pruritos. Sus coberturas eran falsas.
En 1986, sus transmisiones desde Capilla del Monte fueron completas invenciones. Sostenido en su relato jadeante y pequeños esfuerzos de producción, reportaba platillos voladores que eran faros de coches en la ruta o juegos de linternas detrás de un telón.
Su popular camarógrafo ("Seguime Chango", era la muletilla) declaró: "La mancha era real. Pero todo lo demás era pura ficción. Una mancha es una mancha, pero no se encuentra una mancha así todos los días. Como era verano, había un montón de cascarudos muertos y secos. Agarramos algunos y los tiramos en la ruta. Entonces me dijo: 'Voy a entrar y decir 'Hay bichos disecados'". Sus informes llegaron a medir 45 puntos, un rating inusual para un noticiero.
10. ¿Por qué fue asesinado Acoglanis?
El 19 de abril de 1989, Rubén Elías Antonio entró en el consultorio de Ángel Acoglanis en el centro de Buenos Aires y le disparó siete veces a quemarropa. Se dijo que el asesino, hermano del financista Jorge Antonio, exclamó: "¡Maté a un brujo!".
Algunos buscadores de ERKS interpretaron que la muerte del esoterista pretendió acallar algún sórdido secreto. Las simpatías por el nazismo de Acoglanis y las versiones que relacionaban a Antonio con el tráfico de armas, lejos de explicar el enigma, lo acrecentaron.
La jueza María Servini de Cubría cerró la causa tras el suicidio de Rubén Antonio, ocurrida cuatro años más tarde. El expediente fue cajoneado y la muerte del inventor de Erks echó más leña al misterio.
11. ¿Cómo devino Capilla del Monte en foco del contactismo alienígena?
Desde los 90, grupos platillistas herederos de la tradición espiritista se establecen en Capilla del Monte. Sus nombres son Alfa, Bienaventuranza Cósmica, Fici, Misión Rama. Parecían representar los distintos signos de las fuerzas espirituales que se disputaban el Uritorco.
Si al emigrar los peregrinos espirituales anhelaban ser rescatados del fin del mundo, los que sobrevivieron a las inclemencias de los días duros echaron raíces en Capilla del Monte pese a que la nave nunca los vino a buscar, hechizados por las bellezas del paisaje y una vida lejos del ruido.
De los grupos contactistas se afincaron el pionero Fusión Para el Encuentro Cósmico (Fupec) y el Grupo de Estudio Cosmosófico UKSIM, este último objeto de la tesis de Maestría del antropólogo Leopoldo Buderacky en su libro "Bajo el Cerro Uritorco: Cosmos, Lógica y Sentido" (La Reforma, 2008).
Ambos grupos tienen sus sedes camino a Los Terrones, debajo de cuya geografía -sostenía Acoglanis- viven y trabajan 18.000 habitantes de ERKS, a la que se cree una especie de Estación Terminal Cósmica que prepara a los elegidos antes de evacuar el planeta. Y que, como todos los relatos míticos de Capilla del Monte, tiene una existencia más narrativa que material.
Sobre la legendaria "mancha" que inició todo, el vecino que se adjudicó su creación explicaba: "Esa huella se hizo porque eso era lo que la gente esperaba que sucediera. No había nada para mostrar; de ahí surge la idea de 'la postal' de El Pajarillo. Bueno, eso fue lo que hicimos: una buena película basada en lo que la gente quería ver".
Alejandro Agostinelli es periodista y editor del blog Factor 302.4
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