El Tratado de Conquista de 1213 otorga al Vaticano la propiedad del reino de Inglaterra. Por eso la Corporación Británica que Gobierna al mundo pertenece al Vaticano. En 1139 el Papa creo una bula para exonerar a los judíos de todo tipo de jurisprudencia. El Banco jesuita de Roma abrió su primera sucursal en Inglaterra en 1694, en 1820 los Rothschilds eligieron la City de Londres como centro financiero mundial y criminal del mundo.
El Vaticano posee cientos de millones de acciones en las más poderosas corporaciones internacionales, tales como la Gulf Oil, SHELL, General Motors, Betlehem Steel, General Electric, Internacional Business Machines y la aerolínea TWA.
Desde los bancos sionistas del Vaticano, controlados por los Jesuitas, y la Corporación Británica, se controlan todos los negocios de la mafia mundial en el mundo y luego se reinvierten en la City o Wall Street: sólo el dinero de la droga puede superar los 900.000 millones de euros anuales. Todos los negocios petroleros se dirigen desde la City o Wall Street, a través de La Nobleza Negra anglo-holandesa. Hay que recordar que el fundador de la SHELL fue el nazi Bernardo de Holanda, fundador de WWF Adena (junto con el Rey de Inglaterra, ambos cazadores) y del Club Bilderberg.
La Reina de Inglaterra se encuentra en la cúspide de la Orden de Malta en Occidente (a la que el Rey Juan Carlos pertenece). La Orden de Malta es el ejército del Vaticano, heredera de la Orden de San Juan.
La Reserva Federal de EEUU recibe las órdenes del Banco de Inglaterra, que está controlado por los Rothschids. Este es el banco que rige y surte secretamente a las principales dictaduras y gobiernos corruptos del mundo. El Banco de Inglaterra sirve a su cabeza, los Rothschilds, los cuales sirven a su vez al Vaticano, al Banco de Roma, que fue creado en Roma en 1587. El Banco de Roma es el banco Vaticano controlado por el General Jesuita o Papa Negro.
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